Ella está en el horizonte. Camino dos pasos y ella se aleja. Nunca deja que la alcance. ¿Para qué sirve, entonces, la utopía?...para caminar.

martes, 6 de marzo de 2007

Lo más grande


Durante kilómetros caminábamos a trompicones, resbalando en el hielo y sosteniéndonos continuamente el uno al otro, sin decir palabra alguna, pero mi compañero y yo sabíamos que ambos pensábamos en nuestras mujeres.
De vez en cuando levantaba la vista al cielo y contemplaba el diluirse de las estrellas al tiempo que el primer albor rosáceo de la mañana se dejaba ver tras una oscura franja de nubes. Pero mi mente se aferraba a la imagen de mi esposa. Imaginándola con una asombrosa precisión. Me respondía, me sonreía y me miraba con su mirada cálida y franca. Real o irreal, su mirada lucía más que el sol del amanecer. En ese estado de embriaguez nostálgica se cruzó por mi mente un pensamiento que me petrificó, pues por primera vez comprendí la sólida verdad dispersa en las canciones de tantos poetas o proclamada en la brillante sabiduría de los pensadores y de los filósofos: el amor es la meta última y más alta a la que puede aspirar el hombre.
Entonces percibí en toda su hondura el significado del mayor secreto que la poesía, el pensamiento y las creencias humanas intentan comunicarnos: la salvación del hombre sólo es posible en el amor y a través del amor.
Intuí cómo un hombre, despojado de todo, puede saborear la felicidad -aunque sólo sea un suspiro de felicidad - si contempla el rostro de su ser querido.
Ahora sí entiendo el sentido y el significado de aquellas palabras :
"Los ángeles se abandonan en la contemplación eterna de la gloria infinita".


Viktor Frankl, El hombre en busca de sentido (Un psicólogo en un campo de concentración)

3 comentarios:

JuanMa dijo...

En mi vida al menos sí que es verdad: el amor es lo más importante.
Sí que es capaz de ayudarme a ser feliz incluso en los momentos más duros.
Que nunca nos falte.

Besos.

Anónimo dijo...

Es lo más grande; después la fraternidad, la igualdad, la libertad... al final de todo, el dinero.
Salud!

Lorena dijo...

Juanma: Claro que sí. Que no falte el amor. Nos da la felicidad que tanto necesitamos, es nuestra alegría cada día...sin él, ¿qué nos queda? ¿Qué nos aporta tanto como su presencia en nuestra vida? Un besazo, amigo.

Juan cosaco: Jejeje xD Poderoso caballero es Don Dinero pero...el amor es impagable, incomprable...incomparable con otra cosa, aunque por supuesto, no olvido la libertad, la fraternidad, la igualdad, la verdad, la gula...:P Un gran besazo!